Queen - Live Killers

Publicado el 22 de junio de 1979, "Live Killers" es el primer álbum en directo de Queen grabado durante la gira europea "Jazz Tour" y mezclado en los Mountain Studios de Montreux, con el que los británicos fueron Disco de Oro en Reino Unido y Doble Disco de Platino en Estados Unidos. El álbum fue grabado en vivo durante la etapa europea del Jazz Tour, entre el 26 de enero y el 1 de marzo de 1979, capturando a Queen en uno de sus momentos más poderosos como banda en directo. El álbum fue autoproducido por la banda y fue el primero en ser mezclado en sus propios estudios, Mountain Studios en Montreux, Suiza, lo que les permitió un control total sobre el sonido final y la selección de las mejores interpretaciones de múltiples conciertos. 

01.We Will Rock You (Fast Version)
02.Let Me Entertain You
03.Death On Two Legs (Dedicated To...
04.Killer Queen
05.Bicycle Race
06.I'm In Love With My Car
07.Get Down, Make Love
08.You're My Best Friend
09.Now I'm Here
10.Dreamer's Ball
11.Love of My Life
12.'39
13.Keep Yourself Alive
14.Don't Stop Me Now
15.Spread Your Wings
16.Brighton Rock
17.Bohemian Rhapsody
18.Tie Your Mother Down
19.Sheer Heart Attack
20.We Will Rock You
21.We Are the Champions
22.God Save The Queen

ESCUCHAR EL DOBLE DISCO COMPLETO

"Live Killers" presenta un repertorio que abarca desde los primeros éxitos de la banda hasta material de su entonces reciente álbum "Jazz", incluyendo versiones espectaculares de clásicos como "We Will Rock You", "Bohemian Rhapsody", "We Are the Champions" y "Now I'm Here". El álbum destaca especialmente por las interpretaciones magistrales de Freddie Mercury, quien demostraba en el escenario toda su capacidad como showman, y por los solos instrumentales de Brian May, particularmente notable en "Brighton Rock". A pesar de no incluir un sencillo de éxito que impulsara las ventas, como posteriormente reconocería la propia banda, "Live Killers" logró un éxito comercial considerable y estableció a Queen como una de las mejores bandas en directo del mundo. El álbum sirvió como testimonio perfecto de la energía y teatralidad que caracterizaban los conciertos de Queen, consolidando su reputación como una de las fuerzas más poderosas del rock en vivo de finales de los años setenta. 

Queen interpretando la canción "Somebody To Love" durante el concierto que ofrecieron en el Hammersmith Odeon de Londres el 26 de diciembre de 1979.